Logo de Margen   Periódico de Trabajo Social y Ciencias Sociales
Edición digital

Edición N° 52 - verano 2009

Voces, memoria de la Campaña Electoral 2003 en Catamarca

Por:
Claudia Inés Kaen
* (Datos sobre la autora)


En vísperas de un nuevo año eleccionario en Argentina:

1. Intoducción:

En el presente artículo me propongo analizar el discurso de la campaña construido por los candidatos a gobernadores, de los dos partidos mayoritarios a saber: el Frente Cívico y Social (FCyS) y el Partido Justicialista (PJ) y los medios gráficos para reconstruir la cronología de los hechos.

Para analizar la producción discursiva de la campaña, realizaré algunas notas aclaratorias sobre la trayectoria histórica de los dos partidos mayoritarios, objeto de este análisis y los principales acontecimientos en la vida política y social de la provincia de Catamarca. Veamos cuál era la situación interna de estas fuerzas políticas, los dos partidos electoralmente importantes y sus candidatos, el Frente Cívico y Social (FCYS) y el partido Justicialista, que nos proporcionan marcos para comprender los enunciados circulantes que articula la producción discursiva.

En la historia política de Catamarca predominó el bipartidismo, el poder fue liderado por dos partidos tradicionales: el radicalismo y el justicialismo. El Frente Cívico y Social constituye un frente de partidos político que emergió en la provincia de Catamarca en la década del ‘90. Las principales fuerzas mayoritarias políticas que aglutinó en su seno provinieron hegemónicamente del radicalismo, como así también fue integrado por la coalición de distintos partidos políticos: “Movilización” (conformado por algunos dirigentes del peronismo de izquierda); y algunos resabios del peronismo disidente tales como: “El Movimiento Popular Catamarqueño”, “Opción Provincial”, entre otros.
Cabe destacar, que esta nueva fuerza política se mostraba como un partido opositor al gobierno vigente, liderado en su momento por el Gobernador Ramón Saadi. El Frente Cívico y Social surgía como un Frente opositor al régimen saadista, imperante hasta ese momento, en un contexto marcado por una fuerte tensión social y política generada por el macabro crimen de la adolescente María Soledad Morales.

La campaña electoral de 2003 en Catamarca fue muy peculiar en cuanto al funcionamiento del discurso político, la puja por el poder y los acontecimientos que se desencadenaron el 2 de Marzo, día en que se produjo la quema de urnas luego de que Luis Barrionuevo fuese inhabilitado por la Justicia Electoral provincial como candidato a gobernador.

En este marco realizaré a continuación una cronología de los hechos, de los principales acontecimientos acaecidos el 2 de Marzo, fecha en que se realizó el proceso electoral en el año 2003 en la provincia de Catamarca, momento éste en que se suspenden las mencionadas elecciones. Dicha cronología dará cuenta de una realidad que existió y fue un punto de inflexión en la vida social y política de la provincia y tomo repercusión en el contexto nacional.

Cronología de los hechos
El 2 de Marzo: La suspensión de las elecciones

Las principales escuelas de la Ciudad de San Fernando de Catamarca 1 fueron el epicentro de manifestaciones de todo tipo por parte de militantes del Partido justicialista (PJ) que protestaban contra la impugnación de las listas promovidas por el partido opositor (Frente Cívico y Social- FCyS- radical) ante la Justicia Electoral provincial.

La Escuela Fray Malmeto Esquiú, donde estaba previsto que se presentara a votar el candidato a gobernador por el oficialismo, Eduardo Brizuela del Moral (FCyS) fue abordada por un grupo de militantes que impedían el ingreso a toda persona que se presentaba a emitir su voto.

En la escuela 920 Viviendas la Jornada electora también el conflicto se evidenció, con la presencia de militantes que a horas muy temprana se ubicaron frente el establecimiento educativo entonando cánticos peronistas.

¿Qué dicen los textos?

Resulta interesente en esta sección es ver cómo textualizan los principales diarios locales los acontecimientos. El 2 de Marzo del año 2003, “Diario El Ancasti los titulares de los diarios narraban el acontecimiento de las elecciones 2003 en Catamarca: “Con clima tenso se vota hoy”; “Barrionuevo pedirá el secuestro de las urnas”; “Con pronóstico reservado se vota hoy en toda la provincia”. Por otra parte el Diario “La Unión” en primera plana anunciaba “El Frente Cívico denunció a Barrionuevo por incitación de la violencia”.

Sucesos posteriores
El 3 de Marzo día posterior a los disturbios acontecidos en torno a las suspensión de las elecciones del 2 de Marzo, el Diario “La Unión” las noticias principales ocupan la tapa del periódico: “Los disturbios se cobraron la primera <víctima> 2 del gobierno”, “Elecciones 2003. Un atentado a la democracia: Entre destrozos, denuncias y golpes”, “La Ciudad estuvo al borde del caos”. Por otra parte el Diario “El Ancasti” en la sección política, pp2 aparecía como principal título del texto: “En medio de un escándalo, el gobierno se vio obligado a suspender los comicios”.

Estas son las tensiones y conflictos que aparecen en los enunciados construidos por la prensa escrita local en sus principales titulares. El 2 de marzo del 2003 se realizaron las elecciones en las que los candidatos a gobernador de las dos fuerzas mayoritarias eran Brizuela del Moral - por el Frente Cívico y Social - y Luis Barrionuevo - por el Frente Justicialista.

Entendiendo que todo discurso político implica una lucha discursiva entre enunciadores por el poder de asignar sentido. Sin embargo, es importante tener en cuenta, coincidiendo con Arfuch que “todo diálogo está atravesada por múltiples determinaciones, no sólo las inherentes al uso del lenguaje y a las posiciones de los enunciadores (…) sino también las que imponen a las instituciones en cada caso y a los soportes mediáticos en cuestión” (Arfuch 1995:52-53).
Es por ello, que para este análisis parto de la siguiente pregunta como disparador de la reflexión teórico-analítica de este artículo: La pregunta que surge es si ¿ el discurso de la paz dialoga con el discurso de la violencia que remiten a enunciados anteriores que tienen que ver con otros contextos, con otros tiempos, con ciertos sucesos acaecidos en la provincia de Catamarca ( muerte de la adolescente María Soledad)?.

¿ si el resultado electoral (triunfo del Partido del Frente Cívico y Social –FCyS- ) con posterioridad ( Agosto 2003) a la elección suspendida el 2 de marzo de dicho año, fue producto de que el FCyS logró en su discurso instalar al candidato como garante de la paz en base a establecer una diferencia de competencias con el adversario, candidato del Justicialismo (Luis Barrionuevo) a quién asoció con la violencia?

2. Metodología

Me propongo analizar las condiciones que hacen posible los enunciados y la relación dialógica de los discursos puestos en juego por los candidatos de los dos partidos mayoritarios en la contienda electoral, durante el año 2.003. Las categorías analíticas que orientan el análisis de la producción discursiva de los principales referentes políticos de la campaña tomaré algunas categorías analíticas de Batjin, como el dialogismo, la responsividad y complementaré también algunos aportes analíticos de Verón, Arfuch que permitirá arrojar luz en la interpretación del discurso político de los candidatos. Para ello trabare un corpus de discursos (originales) producidos por los principales referentes de la Campaña:

Por el OFICIALISMO:

  1. Senador nacional, candidato a gobernador (Eduardo Brizuela del Moral);
  2. Gobernador de la provincia en ese momento (Oscar Castillo).

Por la OPOSICIÓN:
  1. Senador nacional: candidato para el cargo de gobernador en las elecciones suspendidas el 2 de Marzo de 2003 (Luis Barrionuevo).

Para analizar la producción discursiva de la Campaña

3. Discurso político

El discurso político ha sido objeto de abordaje de diferentes perspectivas y disciplinas en el campo de las ciencias sociales. En este sentido y a modo de una aproximación a la temática las discusiones presentadas por Verón (1987) abren la posibilidad de problematizar y pensar al discurso político como un discurso “adversativo” y “absoluto” 3.
Hay dos características que marcan la especificidad del discurso político, por un lado Verón (1.980) señala su carácter “polémico”, en tanto se construye en relación a otros discursos que están en relación de oposición y enfrentamiento. La segunda característica que le confiere su especificidad, es que el discurso político “solo puede constituirse bajo la condición de presentar esos discursos “otros” 4 como irremediablemente falsos.
El discurso político es pues, típicamente, un discurso “a efecto ideológico”, un discurso que genera la creencia” (ibid: 93-94).

Uno de los supuestos marcados es que el discurso político constituye un desafío fuerte para articular una teoría de la persuasión con una teoría de los efectos del discurso, es decir con una teoría de la recepción, pero también una reflexión de los actores sociales y lo que estos hacen con los discursos. Desde este lugar retomo a Austin para quien se podían hacer las cosas con palabras, las dimensiones de la acción política y de su discurso público encuentran una articulación común a este concepto que da lugar a su vez sobre una perspectiva de análisis necesariamente pragmática.

Lo dicho hasta aquí nos permite pensar que el discurso político se nos presenta como a una comunicación pública “en situación”, porque se vincula con el contexto de enunciación y se orienta a construir y re-definir continuamente colectivos de identificación y acechada por el “otro”, siendo esta tensión, el motor primordial de su funcionamiento.

En la producción discursiva de las dos fuerzas mayoritarias en Catamarca (extiéndase por esto: FCyS –Radicalismo- vs. Justicialismo) se articula una lucha discursiva puesta en escena pública, es posible interpelar a todos los factores que intervienen en la comunicación política. Como diría Arfuch:

“un enunciador identificado como político (candidato o representante, funcionario, dirigente gremial, etc., una temática apropiada, una conjunción de actos lingüísticos orientados a la persuasión (interpelar, diagnosticar, confrontar, polemizar con el adversario, prometer, exhortar) y una recepción identificable más en términos de <ciudadanía> que de <público>” (Arfuch 1995:111).

El diálogo entre “La paz y la violencia” como actividad orientada responsivamente

Como afirma Arfuch, “si el sujeto está conformado y atravesado por la otredad, si toda enunciación es siempre una respuesta, esa “responsividad" hacia un otro para y por el cual se habla, está muy cerca de la responsabilidad. (…), el dialogismo bajtiniano -que también supone una ética de la responsabilidad…) (Arfuch 2001)

Al considerar como principal característica del lenguaje a su constitución dialógica toda enunciación puede ser considerada una respuesta que en el marco del flujo del lenguaje vivo, reclama una respuesta, se dirige hacia otro, por lo que todo hablante resulta un contestatario que sólo puede ser comprendido dentro del contexto dialógico de su tiempo.

“Por la paz de todos los Catamarqueños” son unos de los discursos que se instalan con mayor visibilidad y fuerza en la producción discursiva de la campaña electoral del 2.003.Estas visiones instaladas en el discurso político, debe mucho a la historia política de Catamarca. En las operaciones del discurso, es posible identificar la presencia de ciertos enunciados anteriores, suyos y ajenos con lo cual se establece relaciones (se apoya en ellos, polemiza, o los supone conocidos por su oyente), al decir de Bajtin un enunciado “es un eslabón en la cadena, muy complejamente organizada, de otros enunciados” (1982:258)..

Una respuesta posible siguiendo las ideas de Batjin que la palabra por sí solo cobra existencia en la interacción viva, concebida como una arena que tienen lugar las distintas luchas sociales, cruzándose en ella como fuerzas sociales vivas. En este sentido la palabra pronunciada por una persona individual, es el campo donde tiene lugar la interacción y disputa de las fuerzas sociales vivas (Batjin 1979)

El discurso de la paz y la violencia en Catamarca cobra sentido en un contexto socio-histórico muy particular de la provincia de Catamarca, como bien ya fue señalado más arriba en esta provincia imperó el bipartidismo de los dos partidos tradicionales: el radicalismo y el justicialismo. El Frente Cívico y Social, un partido político que emergió en el año 1990, después de la intervención de la provincia por el Gobierno Nacional. Dicho Frente se perpetua en el poder por un periodo de 12 años consecutivos hasta la actualidad.

También podría decirse que en la relación dialógica de la paz y la violencia se relaciona con una cadena de enunciados anteriores que tienen sus antecedentes en hechos significativos que marcaron la historia política y social de la provincia. En los años noventa el brutal crimen de la adolescente catamarqueña durante el gobierno peronista de Ramón Saadi, marco un contexto signado por una fuerte tensión social y política.
El reclamo por la paz y la justicia de los catamarqueños cobro visibilidad en la arena pública-societal a partir de “Las marchas del silencio” vehiculizadas por distintas movilizaciones producidas en ese momento. El Frente Cívico y Social surgía en este contexto como una fuerza política opositora al régimen saadista imperante en ese escenario.

En segundo término, la quema de urnas el 2 de Marzo luego de la inhabilitación de Barrionuevo como candidato a gobernador por el Frente Justicialista, fue adjudicado por el oficialismo a militantes del PJ. De esta manera, la trayectoria política del Frente Cívico y Social marca ciertas competencias desde el lugar del portador legítimo para garantizar la paz y que la sociedad catamarqueña espera.

El campo discursivo de lo político, según Verón “implica enfrentamiento, relación con un enemigo, lucha entre enunciadores” (1980:16). La idea de dialogismo de Batjin (1979) nos aporta en este artículo para pensar que toda enunciación está constituida como parte de un diálogo con otros y está organizada en esa direccionalidad hacia la otredad.
Veamos aquí como uno de los enunciadores políticos, Eduardo Brizuela del Moral (candidato del Frente Cívico) inicia su comunicación política apelando al uso de meta-colectivos singulares (Verón : 1987) “pueblo” involucra a todos los destinatarios posibles, partiendo de la trayectoria de 12 años del Frente Cívico y Social en el poder, articula una creencia presupuesta en torno a la paz, contribuye a legitimar su posición de enunciador. Este candidato es el referente más importante de la línea “Renovadora” (es una línea interna dentro del radicalismo y la segunda fuerza del partido) 5. Definido el lugar desde donde habla el candidato a gobernador sirve como referencia el siguiente párrafo:

“-Por la trayectoria hace 12 años que el pueblo vive en paz, que se han llevado a cabo muchas acciones, muchas obras, he tenemos un buen servicio de salud, hemos hecho muchas obra en el interior, se han hecho obras en la capital que no se han hecho en otras décadas, el tema de la vivienda, la interconexión eléctrica, etc, etc.. Pero vamos a producir un cambio, tenemos que trabajar en todo lo que hace a la minería, al turismo, en fin son imnumerables la posibilidades que tiene Catamarca” (Eduardo Brizuela del Moral; candidato a gobernador por el FCyS).

La pluralidad de voces, expresada por Arfuch citando a Bajtin, “que hablan sin que nos demos cuenta, en los enunciados que consideramos <propios>: viejos saberes, creencias, dichos de sentido común, verdades que no necesitan demostración, opiniones fijadas por el esteriotipo” (Arfuch 1995:53). Arfuch quien nos habla de la significación que fue el punto de partida de las preocupaciones de la <segunda lingúística entiende al discurso, como una puesta en juego de la lengua, algo que se dirime entre un <yo> y un <tú>, es también social, intersubjetivo, sometido a reglas, lugar no sólo de una intencionalidad sino también de la repetición…” Veamos como en este fragmento se actualizan en el discurso del Candidato del Frente Cívico y Social (FCyS) la creencia y saberes vinculado a la paz:

“- La gente quiere votar el domingo, quiere votar en paz, Catamarca está de fiesta y el país quiere estar de fiesta para el domingo festejando el acto cívico que se debe desarrollar con toda la normalidad y en paz como queremos los catamarqueños que así sea” (Eduardo Brizuela del Moral; candidato a gobernador por el FCyS) (Eduardo Brizuela del Moral; candidato a gobernador por el FCyS).

En los párrafos precedentes, en este mismo acto de enunciación y bajo la creencia presupuesta de “la paz” del enunciador político coexiste en forma latente e implícita la inversión negativa de la lectura destructiva (paz vs. violencia) que define la posición polémica con el adversario (Verón 1987). Por otra parte construye una imagen donde puede reconocerse- y diferenciarse de otros, actualizando una lectura del pasado y una lectura de la situación actual.
De esta manera es posible observar un componente descriptivo 6 donde el enunciador político pone en juego la constatación y el balance de una coyuntura específica de los logros de la gestión de gobierno haciéndose presente lo descripto en la escena comunicativa política. En el orden del poder hacer (componente programático) el enunciador busca en el plano enunciativo articular un colectivo de identificación centrado en el cambio y las “posibilidades que tiene Catamarca”.

Oscar Castillo, un abogado, hijo de Arnoldo Castillo quien fue gobernador de la provincia, luego de la caída del régimen saadista. Perteneciente a la línea “Celeste”, primera línea dentro del Radicalismo en Catamarca. Castillo es el referente ineludible del Frente Cívico y Social y del manejo del poder en la Provincia de Catamarca, en la segunda mitad de la década del ochenta y de los noventa. En el año 2.003 era el gobernador de la provincia. El mandatario tiene una amplia trayectoria en las relaciones de poder y un capital acumulado en la lucha política 7.

El enunciador político habla de la paz desde el lugar que trasciende el ámbito provincial. Utiliza un meta-colectivo singular (“los argentinos”) abarcando los diferentes destinatarios. En la trama persuasiva del mensaje del referente político a sus destinatarios, asentúa un discurso en el orden de la paz, para lograr efectos de persuasión y credibilidad al paradestinatario se apoya en los presupuestos de , “la tranquilidad”, “el respeto”:

“Yo creo que los argentinos tenemos todos la esperanza una expectativa de dejar esta crisis de una vez por todas hacia atrás, y a la crisis la vamos a construir los argentinos pero con presupuestos, la paz, la tranquilidad, el respeto, que yo creo que son los valores que los argentinos debemos mantener y debatir” (Oscar Castillo, gobernador de la provincia en el año 2003).

Luis Barrionuevo fue uno de los principales protagonistas de la vida política en la decaída del 90, constituye la biografía del anti-heroe que para perpetuar su nombre de bronce, también esgrimió a lo largo de su trayectoria la espada, la pluma y la palabra (Olivera 2.004). Uno de sus últimos posicionamientos en el espacio político fue presentarse como candidato a gobernador de Catamarca, su tierra natal 8.

Trataremos de ver la manera en que el discurso del candidato del Partido Justicialista (PJ) Barrionuevo se constituye en contestatario a las medidas tomadas por el gobierno nacional y la estrategia construida por su adversario. En el siguiente bloque discursivo el enunciador político minimiza los acontecimientos vinculados con la quema de urnas en la suspendida elección del 2 de marzo del 2003, imprimiendo un sentido de identificación con el prodestinario y una intención de persuasión a sectores de la ciudadanía que se mantienen “fuera del juego“- el paradestinatario.
De esta manera el discurso político se constituye como una replica descalificadora al adversario a quien le atribuye responsabilidades de los hechos acontecidos el día de las elecciones. En los distintos fragmentos que a continuación presento se actualiza en la escena comunicativa el tópico de la violencia vs. paz:

“Los gendarmes: es un gasto inútil, Catamarca no necesita esto, el 2 de marzo no hubo violencia se quemaron algunas cubiertas en reclamo de la proscripción del peronismo, no hubo violencia no hubo agresión. Las urnas las quemaron ellos mismos no nosotros eso quedo visto en el congreso de la nación así que toda una mentira una patraña fue para no entregar el gobierno” El pueblo de Catamarca va elegir su voto y como siempre todo en paz” (Barrionuevo).

La lucha discursiva para construir la competencia para ser candidato

Otros de los tópicos que giraron en el discurso de los candidatos es la lucha por imponer (la competencia) la posición legítima para ocupar el lugar como candidato a gobernador. Esto se liga a la historia de los agentes en el sistema de relaciones y a su capacidad de hacer.

“En el departamento Andalgalá se me acerca un joven y me dice “yo lo conozco a usted, estuvimos en Andalgalá, dice en la Escuela de Arqueología, yo soy uno de los primeros 17 licenciados de Arqueología, esta Escuela fue creada en mi gestión en la Universidad Nacional de Catamarca, con las primeras ordenanzas de creación” (Eduardo Brizuela del Moral; candidato a gobernador por el FCyS).

Como bien lo plantea Arfuch, la política misma se personaliza, deja de ser una trama compleja de factores de poder, una pugna de intereses a menudo no identificables, para transformarse en cuestión de voluntad, de carácter, de in-capacidades” (Arfuch 1995:119). En el siguiente fragmento es posible identificar los matices que adquiere el discurso del candidato del Frente Cívico y Social donde la estrategia discursiva enfatiza sobre la identidad del candidato en el orden del “hacer ver” (Arfuch 1995:116), de su carácter voluntarioso, de haber recorrido la provincia, de estar relacionado con sus representados:

“Alguien me preguntaba cuantas vueltas di en la provincia, bueno hay lugares que fui cinco veces, lugares que fui una vez y creo que casi no me queda un lugar, una localidad por muy pequeña que sea que no la haya visitado, pero no visitar en un acto relámpago, un acto público y salir por el otro lado, por atrás, sino salir por delante conversando con la gente, haber estado un tiempo escuchando a las representantes de esas comunidades y por supuesto escuchando la problemática de cada zona” (Eduardo Brizuela del Moral; candidato a gobernador por el FCyS).

Si retomamos la Teoría del dialogismo planteada por Arfuch quien cita a Batjin, “toda enunciación dialógica, (…) supone siempre un interlocutor (éste puede estar presente, ausente, fantaseado)”. En este sentido “el atributo principal de todo enunciado es su carácter destinado, modulado por la presencia del otro (el destinatario), en la medida que argumenta para persuadirlo, le responde por anticipaciones… (Arfuch 1995:30-31)

El discurso político del candidato del Frente Cívico y Social en el siguiente fragmento que presentamos no sólo enfatiza en detalles de la personalidad propio de los candidatos, sino también tiende a “dirimir los términos, incluso en relación con el adversario, en pugnas que evocan rencillas domésticas y sus mecanismos de culpabilización” (Arfuch 1995:119). En esta la línea temática del discurso del candidato del FCyS apunta a descalificar al adversario:

“Yo creo que en algún aspecto si porque la gente ha sabido quien era el supuesto candidato en ese momento. Porque no lo conocía, nació en Catamarca este Señor y se lo conocía en Buenos Aires en todo país menos en Catamarca. La gente ha sabido quienes quieren llegar al poder con la violencia y conductas patoteriles” (Brizuela del Moral, a gobernador por el FCyS).

En esta lucha discursiva de los candidatos de la contienda electoral, el discurso político del candidato del Frente Justicialista se posiciona desde el saber y el poder hacer (componente programático) utilizando un meta-colectivo singular (“la gente”) para imprimir un efecto de persuasión y destinación múltiple:

“Porque camine la provincia hice pueblo por pueblo y la gente aquí es muy católica y todos están rezando para que cambie la historia de Catamarca, así que estoy muy seguro de esto” (Barrionuevo).

En este fragmento el candidato del Partido Justicialista (PJ) vuelve reforzar en los primeros párrafos su competencia, confiriéndose atributos de orden religioso:

“Soy muy católico, soy muy católico, muy creyente y pero le digo que confió en el artículo que hicimos y me encargue yo personalmente de recorrer la provincia palmo a palmo y esto me da la pauta que vamos a ganar y vamos a ganar muy bien bajo ningún punto de vista pueden proscribir a alguien que nació se crió estudio en Catamarca, senador nacional por Catamarca, vive en Catamarca o sea bajo ningún punto de vista o sea así que bueno cuando uno tiene un gobierno como el que tenemos aquí en Catamarca dictatorialmente en todo sentido que la justicia provincial es adicta a ello así que pero no importa a mí lo que me interesaba es que el peronismo gane para cambiar la historia el peronismo va a ganar este es el ultimo interés que tuve yo” (Barrionuevo).

A modo de conclusión

Analizar al discurso político como relación dialógica de Bajtin nos invita a ir más allá de la superficie discursiva del texto y analizar las marcas que los discursos dejan. Estas marcas dan cuenta de una cadena discursiva, de otros enunciados que se vinculan con otros contextos, con otros tiempos. En este sentido, el discurso nos remite a una polifonía de voces que dialogan entre sí.

En el discurso del referente político del frente gobernante (FCyS) cobra peso en la escena de la comunicación dialógica política el presupuesto de la creencia explícita de la “paz”, instalando al candidato del FCyS como garante de la paz en base a sus competencias. Lo que actualiza en un sentido implícito el binomio de la paz vs. violencia. Este discurso dialogo con enunciados de otros tiempos (caso María soledad, intervención en el año 1990 al gobierno Saadista) cuando se vincula al candidato y al partido de la oposición con la violencia, apelando al imaginario colectivo de que la violencia en Catamarca está asociada al partido opositor.

En este sentido el discurso es social, intersubjetivo, cumple una actividad responsiva en tanto que plantea una relación con un “otro” y lo interesante para el analista es interpretar esta cadena discursiva, la multiplicidad de voces y los sentidos atribuidos en este contexto de producción discursiva.

En este marco de análisis es posible plantear que el discurso barrionuevista tiende a destruir la tesis de violencia definido por su adversario adjundicándole la responsabilidad al partido gobernante de los acontecimientos de violencia en la provincia, en las frustadas elecciones del 2 de Marzo.

El discurso político es imposible pensarlo sin una relación a un “otro”, el adversario. En este caso el candidato oficialista trata de reforzar su competencia y tiende a descalificar y desacreditar la competencia del aniversario para ser candidato a gobernador de la provincia.

En las distintas estrategias que ponen en juego los enunciadores políticos de los partidos mayoritarios de la contienda electoral del año 2003, el discurso se vuelve aquí persuasivo para captar a aquellos destinatarios que se mantienen fuera del juego (los indecisos), llamado por Verón el paradestinatario, mientras que cuando se dirige al contradestinario adquiere el matiz de polémico y se refuerza cuando está dirigido al predestinatario (los partidarios).

Si volvemos a la pregunta que dio origen al presente artículo, puedo decir que durante la campaña la producción discursiva se organizó en el orden de enfatizar la competencia de los candidatos y en base a ella quién es el que garantizaba la paz, por encima del proyecto político y programático de gobierno como así también apelando a la memoria histórica-política se planteó la interacción dialógica de la antinomia paz vs. violencia.

Bibliografía:

Verón, E. (1.980) Discurso, poder, poder del discurso. Anais de primeiro coloquio de semiótica”. Río de Janeiro, PUC/Edicoa Loyola.

Verón, E., Arfuch et. Alt (1.987) El discurso político. Lenguajes y acontecimientos, Buenos Aires, Hachette. Univ.

Arfuch, L. (1995) La entrevista, una invención dialógica, Barcelona, Paidós.

----------- “La visibilidad de lo privado: nuevos territorios de la intimidad”. Mundo Urbano. Julio/Agosto 2001- Nº 12

Austin, J. Como hacer cosas con palabras (Conferencia I, II, XI y XII), Barcelona, Paidos.

Olivera, D. (2.004) El macho. José Luis Barrionuevo. La bestia negra de la democracia. Norma: Buenos Aires, Argentina.

Bajtin, M. (1982) Estética de la creación verbal. SXXI Editores Argentina.

NOTAS

1 Capital de la provincia de Catamarca

2 Entrecomillado en el título del periódico

3 “Como discurso en función persuasiva, el discurso político en nuestras sociedades capitalistas industriales es el heredero histórico del discurso de la religión: se presenta como discurso absoluto, con la sola diferencia que reconoce la existencia de otras religiones que son lógicamente, falsas” (Verón 1980: 93-94).

4 Entrecomillado en original

5 Este agente es portador de un volumen global relativo de capital a partir de sus diferentes posiciones ocupadas a lo largo de su trayectoria política. Deviene del campo académico, en tanto que fue Rector de la Universidad Nacional de Catamarca; es Ingeniero Agrimensor, se desempeño como Intendente de la Ciudad de S.F.V. de Catamarca. Fue el co-fundador del Frente Cívico y Social (FCyS) en la década de los ’90, en un escenario donde ocurría la trágica muerte de la adolescente María Soledad Morales y en donde emergieron las multitudinarias marchas del silencio, durante el gobierno del Dr. Ramón Saadi (Partido justicialista). Esta etapa candente de la historia catamarqueña se produjo una fuerte división social, entre los ciudadanos adherentes al régimen de gobierno imperante en ese momento y a aquellos que apostaban a la fuerza partidaria nueva encuadrada en el Frente Cívico y Social.

6 Para Verón “en el plano del enunciado, el segundo nivel fundamental es el de los componentes. Este nivel opera como articulación entre enunciado y enunciación, puesto que los componentes definen las modalidades a través de las cuales el enunciador construye su relación con las identidades del imaginario” (1987:19-20).

7 Entre los años 1989-1.991 fue diputado nacional, y reelecto nuevamente como diputados nacional. En el año 1982 regresa a Catamarca para trabajar en la conformación de la juventud radical (JR), la FM en la Universidad Nacional de Catamarca y contribuir a la organización del partido. A fines de 1982 en el primer Congreso Provincial de la JR en Pomán resulta electo Presidente, cargo que ocupa hasta 1984. Dentro de las múltiples posiciones que fue ocupando tanto a nivel provincial y nacional, como por ejemplo Secretario General del Comité provincial (1987-1991 y continúa), Vicepresidente 2°, 3° (1993-1997) del Comité Nacional de la UCR, Presidente de la poderosa línea “Celeste”, fue postulado por sus integrantes candidato a Senador Nacional, ratificado en la Convención Provincial de la UCR (9/9/1995)

8 Su vida pública parecía nacer en 1985 cuando ocupó el cargo de Secretario de Acción Social a nivel nacional del Sindicato de Gastronómico. Desde una mirada reconstructiva de las relaciones que articuló este agente podemos pensar que Barrionuevo fue un protagonista central de la escena política a nivel nacional de los últimos 20 años. Su sociedad con Enrique Nosiglia, “el monje negro” (ibid:12) de Raúl Alfonsín, en 1989 su influencia en la llegada de Carlos Menem a la presidencia; su papel decisivo en el Pacto de Olivos, su amistad con Eduardo Duahalde, opositor numero uno de Carlos Menem; su oposición viceral hacia Domingo Cavallo y por Nestor Kirchner; a quien acusa de perseguirlo; su amistad con el empresario del correo postal Alfredo Yabrán y su fuerte presencia en el PAMI, obras sociales, sindicatos, clubes de futbol (ibid). Desde una fuerte vinculación con los espacios de poder, y desde ese lugar dejó entrever un discurso libre de coacciones y censura que daba cuenta de algunas pinceladas de la Argentina de los últimos años “la Argentina no se hace plata trabajando”, o que la solución para los problemas del país era “dejar de robar por dos años” unas de las frases mas conocidas en todo el país.



* Datos sobre la autora:
* Claudia Inés Kaen
Licenciada en Trabajo Social. Mgter. En Ciencias Sociales, Especialista en Metodología en Ciencias Social. Doctorando del Doctorado en Semiotica, CEAS, Córdoba.

Volver al inicio de la Nota


Volver al sumario Avanzar a la nota siguiente Volver a la portada para suscriptores