La cuestión social
Uno de cada tres argentinos carece de cobertura de salud y cada vez más gente recurre a los hospitales.

Difundida por: IV Congreso Argentino de Salud 8/15/2001
El panorama sanitario se agravó en la Argentina por el aumento de la desocupación y de trabajadores en negro, que no realizan aportes y están fuera del régimen social. Esta es una de las causas por las que se desfinanció el sistema de salud. Las obras sociales perdieron 2,2 millones de afiliados y ahora tambien en las prepagas se registra una caída en la cuota promedio y en la cantidad de asociados. Casi el 70 por ciento de los hogares de menores ingresos carece en la Argentina de obra social y depende exclusivamente del hospital público para el cuidado de su salud.
El deterioro en la atención sanitaria, se ve agravado por un desempleo record que afecta a unos 2.300.000 habitantes y por la cantidad de trabajadores en negro, que ya suman casi 3.500.000 personas. Este cuadro deficitario en la seguridad social fue el eje del IV Congreso Argentino de Salud, que deliberó en Córdoba organizado por la Asociación Civil de Actividades Médicas Integradas (ACAMI), cuyo titular, Tomás Sánchez de Bustamante, alertó sobre el "desfinanciamiento del sistema sanitario" y subrayó la "urgente necesidad de buscar alternativas" para salir de la crisis.

El deterioro se evidencia en los 2.200.000 afiliados que perdió en la última década el sistema de seguridad social. Según datos de ACAMI, la población que recibe atención medica a través de las obras sociales y el PAMI descendió de unos 18 millones en 1990 a 15,8 millones en la actualidad, como consecuencia de un desempleo record y un fuerte incremento del trabajo en negro. Así, entre 1990 y 1998, mientras la población aumentó 11 por ciento, las obras sociales redujeron su padrón 12 por ciento. A principios de 1990 había en la Argentina unas 400 obras sociales, mientras que ahora no quedan más de 270 que afrontan un oscuro panorama: la mitad padece dificultades económicas, hay una decena concursadas y cuarenta atraviesan una situación muy crítica, de acuerdo a un informe de ACAMI presentado en el Congreso.
En la medicina prepaga Pero la crisis no sólo impacta sobre las obras sociales, sino que también afecta a la medicina privada: el titular de la Asociación de Empresas de Medicina Prepaga (ADEMP), Pablo Giordano, reveló en el Congreso que el sector privado perdió sólo en el último año un 8 por ciento de sus asociados, además de registrar un fuerte traspaso desde planes con cuota alta y mayores coberturas, hacia otros más económicos.
Este proceso fue paralelo a la generación de una alta morosidad en el sistema. Por ello, Giordano reclamó que se acote la cobertura establecida en el Programa Médico Obligatorio (PMO) y se racionalicen las prestaciones de acuerdo a los recursos con que cuenta el país. "Es absurdo que se incluya en el PMO a la fertilización asistida, cuando hay chicos que se mueren desnutridos" ejemplificó Giordano. Para el sanitarista Ginés González García, quien expuso en este Congreso sobre la inversión en salud y el costo de los insumos "el 20 por ciento más pobre de la población deja de adquirir medicamentos con una frecuencia cinco veces mayor que el 20 % más rico, y muchos argentinos que se sienten enfermos, ni siquiera concurren a los hospitales por no enfrentarse con una revisión médica que terminará en una receta que no podrán pagar", según enfatizó.

Además, de acuerdo con un estudio presentado por ACAMI sobre datos del Indec y del programa Siempro, el 20 por ciento más pobre de los hogares argentinos --7,4 millones de personas-- tiene apenas un ingreso promedio de 355 pesos mensuales y carece en general de otra cobertura médica, por lo que debe recurrir a un hospital público desabastecido y rebasado ante la creciente demanda, ya que el 27 por ciento de la gente que ahora concurre a hospitales, antes era atendida por el sector privado. Las dificultades que tiene el Estado para atender la salud de la población explican que la mortalidad infantil continúe en niveles altos, del 19,9 por mil, pese a que se la logró reducir en los últimos años Es que la mitad de la población menor de cinco años depende de la atención que le brinda el Estado, y algo similar ocurre con la de entre 5 y 14 años, aunque en este caso existe una mayor presencia de menores cubiertos por obras sociales.

El sistema de salud argentino sufrió un fuerte proceso de desfinanciamiento, a partir de las sucesivas reformas que lo llevaron a perder ingresos por 14.726 millones de pesos, según un informe elaborado por la Fundación Isalud. Al referirse a toda esta problemática, el ministro de Salud, Héctor Lombardo, advirtió que "si no se modifican los sistemas de seguridad social no habrá salida a la crisis", y opinó que esa estrategia debe basarse en garantizar la "atención primaria de salud". Lombardo aseguró que el recorte de gastos encarado por el Estado Nacional para alcanzar el "déficit cero" no afectará las prestaciones sanitarias, al pronunciar el discurso de clausura de este Congreso.

El Cuarto Congreso Argentino de Salud fue organizado por la Asociación Civil de Actividades Médicas Integradas (ACAMI), entidad que nuclea a prestadores sin fines de lucro e integran -entre otros- los hospitales Alemán, Británico, Italiano, San Juan de Dios, sanatorio San José, Mater Dei, William Hope, Clínica Reina Fabiola, Hospital Italiano de Córdoba, CEMIC, OSDE y la Fundación Favaloro.

Los datos clave del sistema de salud

  • El gasto en salud de la Argentina ronda los 24.000 millones de pesos anuales, el 8,4 % del Producto Bruto, y una cápita de 630 pesos.

  • Casi el 9 % del consumo de los hogares se destina a atención médica y gastos para la salud.

  • Los medicamentos y material descartable representan la mitad de ese gasto.

  • El 40 por ciento de la población carece de cobertura asistencial.

El gasto por sector

  • Las obras sociales provinciales atienden a 4 millones de afiliados con un gasto anual de 1.980 millones de pesos.

  • Las sindicales reúnen a 10,8 millones de afiliados con una recaudación de 3.200 millones de pesos anuales.

  • Las de personal de dirección nuclean a 880 mil socios con 850 millones de recaudación.

  • La medicina prepaga tiene 2.900.000 afiliados, con ingresos anuales por 2.390 millones de pesos.

  • El sector público gasta 5.500 millones de pesos para una población sin cobertura que ronda los 14 millones de personas.

  • El PAMI atiende a 3,8 millones de personas.

  • El gasto en medicamentos ronda los 4.500 millones de pesos anuales.